La niña de Papá II
La niña de Papá II
Follada en la cocina
Entre en casa a las 7 de la tarde; el aroma de la cena; el aroma de las arepas reina pepeada flotaba en el ambiente; fui a la cocina la pequeña Mónica obediente estaba en el fregadero su atuendo me puso la polla dura al verla esta de espalda; su faldita de cuadros apenas le cubría la mitad del culo dejando ver una joyita en su ano; esta brillaba por la luz que se reflejaba en la joya, también brillaban sus muslos los jugos del coño escurrían por ellos. me acerqué y abrazándola de atrás le preguntándole:
- ¿Cómo está la niña de papá? - Dándole un
azote en el culo.
- ¡Ohh! - gimió. - Papi que rico que llegaras.
Estaba ansiosa porque llegaras. - dándose la vuelta vi brillar sus ojos esos
ojos tan parecidos a los de su difunta madre y abrazándome me beso en la boca.
- Estoy tan cachonda desde que me hiciste mujer. - Y llevando una mano a mi
entre pierna agarro mi paquete es movimiento me excito más si se puede.
- Que putilla quieres la polla de papá. -
dije. - De rodilla zorra para que papá de polla. - La niña cayo de rodillas
expectante, mientras que yo desabrochaba la correa y el pantalón el pantalón
cayo el bóxer estaba estirado a causa de la erección que tenía. Mónica al
escuchar el pantalón en el suelo tomando el split del bóxer lo bajo viendo en
toda su envergadura mi polla; el pubis rasurado mi polla de 22 cm de largo y
gruesa apuntaba directamente a la boca de Mónica, ella abrió la boca y mi polla
entro en ella. tómala del pelo le fui
follado la boca con suavidad. Mónica tragaba con suavidad toda la longitud de
mi falo, me quedaba extasiado como la polla desaparecía dentro de su boca.
Pronto comencé a follarla
con fuerza su saliva salía por la comisura de sus labios sus ojos miraban
directamente a los míos como pidiendo clemencia, dejé que ella fuera la que se
follara. Mónica agarrándome de las nalgas se fue follando.
Mis gemidos fueron inundando
el ambiente ocultando los estertores de Mónica por respirar: - A putilla de
papá le encanto su ración de polla ¿no? - dije entre unos gemidos mi orgasmo se
estaba formando dentro de mis testículos. Mónica que ya sabía cómo felarme,
saco toda la polla de su boca y chupo mis bolas, me encantaba cuando hacía eso.
Pregunto:
- ¿Dónde quieres la lefa Zorrilla? -
Restregando la polla por su lindo cara. - Yo quiero llenarte el culo de leche,
¿eso es lo que quieres que tu papi te llene el culo de leche? - Pregunte
abofeteando las mejillas de mi hija con la polla.
- Uy, papi, en mi culo deseo tu polla en mi
culo. - Dijo la joven rubia. La levanté, recostándola contra el paredón de la
cocina le azoté el culo, poniéndome yo esta vez en cuclillas le abrí las nalgas
le saqué el dildo del culo, viendo el esfínter abriese y luego cerrarse le di
una buena lamida en el ojote. Levantándome y poniendo mi polla en el esfínter
la fui penetrando suavemente, la polla entro en toda su longitud.
Al estar toda la polla
ella gimió:
- ¡Ahh! Papi que rico - Dijo. - Mi culo está
lleno de polla paterna. -
La empecé a follar sacaba
la polla la mitad y la volvía a clavar por fuerza. Mónica gimió:
- ¡Ahh! papi. - Le sacaba la polla totalmente
del culo y la clavaba en su coño que por lo mojado entro con facilidad. Se la
volvía a sacar y la volvía a penetrar por el culo.
- ¡Ahh! –
La folle intercambiando el orificio entre el
culo y el coño. me encantaba intercambiar el orificio el cuerpo de Mónica
reaccionaba con temblores su espalda se arqueaba sus piernas eran de gelatina:
- Papi estoy a punto. - Me dijo y sacando la
polla de su coño la clave con fuerza en su culo y la folle con fuerza mi
orgasmo también estaba a la vuelta de la esquina y deseando que nuestros
orgasmos fueran simultaneo bombee la follada ella grito:
- Me corro. - sus jugos salieron del coño mi
bombeo fue más rápido mientras mi lefa llenaba su culo la abrase y la bese era
el hombre más feliz de la tierra pues me follaba a mi hija solo melancolía
podía sentir al no poder compartirla con mi amada Mónica........
Comentarios
Publicar un comentario